Caminar con la mirada fija en Jesus

Dios esta cerca, juntito a cada uno de nosotros.
No podemos verlo, pero sentimos que nos cuida.
En estos días de Cuaresma, estamos con la mirada fija en Jesús.
Meditamos esos momentos de su pasión y su muerte, con dolor y arrepentimiento.
Estamos en este tiempo de esos cuarenta días acompañando a Jesús.
Toda ofrenda, sacrificio, oración, penitencia, ayuno, es poco para sentir el dolor del Senor.
Pero en nuestra debilidad y fragilidad humana, algo le ofrecemos, lo que nos cuesta.
Ofrendamos a Dios para redimir nuestras culpas.


Comentarios

Entradas populares de este blog